Corría el 2013 cuando mis primos Ingrid y Sergio me propusieron que les casará. Hasta ese momento no sabía nada de bodas, pero claro, como tenía mi faceta teatral me animé a hacerlo. No sabía que después acabaría siendo el Maestro de ceremonias de otras parejas.
Fue una boda muy especial para mí. Participan grandes personas y amigos.
La aventura empezó a la salida de la boda.
Unos amigos de mis primos se me acercaron y me dijeron: «Oye se nota que tienes experiencia como Maestro de Ceremonias. ¿Te gustaría casarnos a nosotros también?
Y desde esa boda llevo ya cuatro años celebrando ceremonias. Algo que me encanta. Quedo con cada pareja para conocerles y hacer una boda personalizada: Música, ceremonia, protocolo, etc…
He tenido la suerte de participar en bodas tradicionales, pero también modernas, ibicencas, temáticas.
Pero en todas he tenido algo en común… Las parejas han quedado encantadas.
¿Por qué sigo haciendo de Maestro de Ceremonias?
Principalmente porque me gusta. Yo tengo ya mi trabajo de oficina, así que hago esto porque verdaderamente me gusta. Por eso el precio es mínimo. Mi intención es poder hacer algo entrañable.
Además no tengo a más de dos parejas por semana. Me gusta dar un trato especial a cada una de ellas. Quiero que cada boda sea única.
¿Por qué la gente quiere un Maestro de Ceremonias?
Principalmente porque no quieren que les case el concejal de turno, o el cura aburrido. Quieren algo especial y original. Por eso creo que funcionan tan bien estas bodas.
Por cierto, ¿Sabías que tener un Maestro de Ceremonias está muy de moda entre las celebrities de Estados Unidos? Pero como ya te comentaba, es una tradición que no se ha quedado solo allí, cada vez más parejas quieren tener su propio Maestro de Ceremonias.